Proyecto

Bonos de Carbono

¿Cuáles son? ¿Qué tipos hay?
Una empresa carbono neutral es aquella que tiene un balance neto de emisiones igual a cero. Emite la misma cantidad de GEIs de los que compensa.

¿Cómo convertirse en una empresa carbono neutral?
El camino hacia dicha neutralidad consiste en pasos concretos que se traducen en medir – reducir – compensar.

El último de esos pasos, tiene que realizarse necesariamente a través de los Bonos de Carbono.

¿Por qué necesitas saber qué son estos proyectos?
Porque ellos capturan o evitan que se emitan a la atmósfera distintos gases de efecto invernadero (GEI) con el objetivo de mitigar los efectos del cambio climático, y las empresas de todo el mundo, chicas medianas y grandes, pueden apoyarlos y obtener beneficios.

¿Cómo funcionan?
Estos proyectos son verificados por entes internacionales que validan y certifican su adicionalidad y sus beneficios socioambientales. Una vez validados, los proyectos emiten bonos de carbono, los cuales representan 1 TNCO2eq (tonelada de dióxido de carbono equivalente) absorbida o evitada, al cual pueden acceder las empresas para compensar tanto sus emisiones remanentes, como la de sus productos o eventos.

¿Qué tipos de proyectos emiten bonos de carbono?
Algunos de ellos son: 

Reforestación

Vinculado a la plantación de nuevos árboles. Los proyectos de reforestación plantan miles de árboles, a menudo transformando la tierra degradada para la agricultura en un bosque. De los tres tipos de proyectos forestales, suelen ser los mejores para remover rápidamente CO2 de la atmósfera, porque los árboles jóvenes absorben más carbono de la atmósfera que los árboles completamente desarrollados. Los proyectos de reforestación obtienen bonos de carbono por cada tonelada de CO2 que extraen de la atmósfera que se captura en la biomasa de los árboles.

Conservación

Ligado a la protección de bosques antiguos de la deforestación. La conservación de los bosques (también llamada deforestación evitada) tiene como objetivo proteger el enorme carbono almacenado en los bosques primarios existentes. La reforestación tropical generalmente captura 11 toneladas métricas de CO2 por hectárea por año, pero la pérdida de una hectárea de bosque maduro puede liberar más de 30 veces esa cantidad de CO2, más de 400 toneladas métricas, todo a la vez. Por eso es vital no solo plantar árboles, sino también proteger los bosques existentes que están amenazados.